sábado, 19 de junio de 2010

Ausencia

Debería sentirme mal. Debería sentirme horrible cada vez que despierto y veo que mi cama es gigantesca (y eso que es de plaza y media no más, no debería sentirla tan grande).

Debería suspirar con tristeza al sentarme en el living a beber café y comer tostadas, y tontamente recordar que no comí tostadas contigo.

Debería sentirme sola. Y no debería sonreír. Y tendría que tener la mirada triste cada vez que me siento en el sofá, al almorzar o simplemente cuando estoy dibujando en la croquera.

¿Por qué no me siento así? Tu ausencia es palpable. No necesito explicaciones metafísicas. De plano, sé que no estás porque no estás. Porque no te puedo abrazar cuando quiero, ni besar cuando quiero. Pero es raro. Porque sí estás ahí. Porque eres mágico. Porque vez que mi cerebro empezaba a decir "no está, no está...", llegaba tu perfume, tu yogurt, tu voz, tu ser etéreo, con una sonrisa extraña. Sí, fue tantas veces que pasó eso, que mi cerebro se aburrió. Y con respecto a ti, es el corazón el que decide. Y él decidió que sí estás.

Entonces...qué horrible. No te puedo extrañar, porque estás ahí. Pero si extraño tu presencia física. Pero en esencia, siempre estás conmigo...y estas líneas fueron el intento inútil nº 3272749814 de tratar de explicar eso ¬¬

Me gusta ocupar entradas en ti. Es como matar el tiempo. O pensar que cada entrada es un día menos. Suelo hacer cosas que me recuerdan a ti en estas entradas. Como ahora, que como yogurt congelado ^^. No siento mi mano derecha ^^ Me agrada esto de ser ambidiestra.

¿Ves? Y a pesar de que estás a miles de kilómetros, no dejo de sonreír. Como dice mi madre, esa sonrisa luminosa que no tenía desde hace mucho tiempo.

Me da igual si el mundo se acaba el 2012. Ya te conocí y ya me hiciste sonreír. Y ahora, me haces feliz. Puedo pedir mil cosas más, pero...¿Podré ser más feliz?

Sí...siempre me queda ese sueño n.n

1 comentario:

Edo dijo...

"
Me da igual si el mundo se acaba el 2012. Ya te conocí y ya me hiciste sonreír. Y ahora, me haces feliz. Puedo pedir mil cosas más, pero...¿Podré ser más feliz? "

me mataste con eso, manita...
he pensado algo similar por ahí, quizás en situación similar
:)
Te quiero, manita!


(P.S.: me alegra poder ver de nuevo tu blog... se encuentra mucha sabiduría por acá, y lecciones de vida!)