Es una extraña manera. Es sacarte de mi vida, pero deseando internamente que digas "quiero quedarme". Aunque, claro, tengo plena conciencia que no lo harás. Soñar no cuesta nada ^^.Pero eso me hizo libre. No como quería, claro está. No es la libertad que ansiaba, esa sin miedo, sin nada. Esa libertad que buscaba casi sin buscarla. No, claro que no es esa. La sensación de libertad que tengo ahora es demasiado fuerte, demasiado increíble. Sonrío sin que tenga causas, a pesar de tener una pierna mala como que camino más animada. Hablo con la gente de la micro.
Tus ojos están más claros...me gusta verte feliz...
¡Claro que estoy feliz! Es increíble pensar que podría ser aún más feliz que esto (porque puedo, lo sé). Y sobre todo, más libre. Pero aquí me tienes. Para ser libre tenía que decirte "largo". Y es increíble saber que no te importa absolutamente nada que te haya echado de mi vida. O peor aún, que a pesar de amarte como el ser que eres, no sufrir con la decisión tomada. Siempre dicen que es lo mejor. Y es verdad.
No negaré jamás que me hubiese gustado ser libre contigo. Pero mi libertad más perfecta ahora es lejos de ti.
Gracias por todo. A pesar de todo, no olvido lo feliz que siempre me haces cuando te vas. No por irte, sino porque en esos momentos es cuando más dulce eres.
Y tal vez, alguna vez, diré que a mi libertad le basta tu cielo...
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